Enseñando la Biblia a los bebés

Enseñando la Biblia a los bebés

Los bebés pueden y están aprendiendo cada momento en que están despiertos. Ellos aprenden constantemente al observar, sentir, probar, oler, escuchar y experimentar. En la iglesia, los maestros trabajan diligentemente para proveer oportunidades a los bebés para que entiendan las verdades bíblicas. Cuando usted esté en el salón de los bebés de la iglesia, nunca se dedique solamente a cuidar a los niños. ¡Enséñeles! Use la Biblia para enseñar a los bebés y a los niños de un año de…

Si un niño…

Si un niño le habla, escúchelo
Si un niño le pregunta, respóndale
Si un niño no le habla, háblele usted
Si un niño llora, no lo deje llorar solo, consuélelo
Si un niño no es feliz, enséñele a descubrir el valor de lo que posee
Si un niño lo llama, no tarde en ir a él
Si un niño no juega, invítelo a jugar
Si un niño le pide, dele sólo lo que conviene
Si un niño está solo, dele todo lo que pueda de su tiempo

Instruye al niño en su camino.

ninoCuando mi hijo de 2 años, comprendió que estaba en una iglesia, le llamó la atención que el predicador hablara de Jesús, por lo que preguntó a su papá, y el de manera cariñosa contestó que Jesús estaba en su corazón, en ese mismo momento empezó a halar su camisa, y le pedía que lo sacara. Mi esposo amablemente le explicó que Jesús lo amaba, que lo había creado en la pancita de su mamita, y que quería vivir en su corazón, fue ahí cuando Jonathan aceptó que Jesús viviera en su corazón, tal vez no como lo hemos aceptado nosotros, pero si de una manera tan inocente y pura.

Hoy Jonathan tiene 6 años y llama nuestra atención cuando habla con sus amiguitos y les cuenta que Jesús vive en su corazón

Rebeldía en los niños. (Parte II)

Existe otro fenómeno que nunca he sido capaz de explicar, referente a las relaciones entre hermanos. Cuando hay dos niños en una familia, es casi seguro que uno será complaciente y el otro rebelde. El niño que tiene una buena disposición es muy simpático. Sonríe dieciséis horas por día, y trata de hacer lo que sus padres desean, ocupado en hacerlos más felices. En realidad necesita los elogios y la aprobación de ellos. Por lo tanto, el deseo de ganar…